Chica de Artó

Chica de Artó
Artó

martes, 28 de enero de 2014

La separación


Miro y remiro las portadas de los periódicos y revistas, no sólo las de temas del corazón incluso las estrictamente económicas, y todas han encontrado un argumento para hablar del affaire de Hollande, ese regio mandatario de Francia liado ahora con una actriz 17 años menor. No he podido resistirme porque, lo digo abiertamente, me encantan todas estas historias rocambolescas de intrigas y pasiones de personajes tan serios e importantes que viven al margen de cuestiones tan comunes y corrientes. ¡Pero no! Resulta que esconden una vida “privada” que es como para montar una trilogía erótica que le daría vuelta y media a las sombras grises
La trayectoria de este hombre de 58 años, que no se ha casado nunca, con cara de pollo y sin la menor gracia visible es, por decirlo menos, sorprendente. Ha ido enganchando una relación tras otra, con mujeres espectaculares no sólo por bellas, sino por inteligentes y talentosas, sin pausa entremedio. Y yo miro las fotos y me quedo como exigiendo una explicación.

martes, 21 de enero de 2014

Deliciosas mentiras


femenina.es

A veces no es que nos tomen por tontos, es simplemente que nos dejamos mecer en el vaivén de las mentiras porque son suavecitas y embriagadoras.
He pasado de estar asqueada por creer que desde la televisión nos mienten para someternos, que desde las revistas nos engañan para que veamos un mundo que no existe, que los de la publicidad son unos malvados que no saben de límites con tal de hacernos caer en la trampa, y que ya no se puede con tanto canto de sirena, a sentirme muy orgullosa por darme cuenta, para inmediatamente dejarme caer y acariciar encantada por el embrujo del engaño.
Si te fijas verás que hay mentiras para todos los gustos, no así verdades que son mucho más difíciles de digerir, áridas y amargas, incómodas y hasta explosivas, además nunca tienes la seguridad total de que lo sean. Las mentiras en cambio, llegan a sentar bien, unen a la gente -en particular a las familias- tienen efecto reparador, son constructivas y son absolutamente auténticas.
Es balsámico que nos digan que estamos igual que hace diez años, cosa científicamente imposible, pero muy edificante.
A la mentira en sí, súmale que cada uno escucha lo que quiere escuchar y que entendemos sólo aquello que nos interesa. La amalgama es perfecta.
No sé tú, pero yo he escuchado mil veces eso de “la vida es muy corta para amargarse”, “más disfrutar y menos pensar” y demás versos sabios que nos dice la gente que está bien informada. ¡Qué temperatura más ideal hay bajo el manto del convencimiento de que todo es cuestión de cómo se mire, que los límites son móviles y que la energía positiva mueve montañas! Los ignorantes son buenas personas y los tontos pueden ser muy simpáticos; no así los que no quieren ver el lado bueno de las cosas que son unos desagradecidos que se condenan a la infelicidad.

martes, 7 de enero de 2014

Tango para bordar



Hay sentimientos tan vagos, tan difusos que cuesta calificarlos como malos. Y pareciera que en el fondo albergan algo de bueno, aunque haya que rebuscarlo.
La nostalgia tan propia de la edad adulta y que atribuimos con tanta facilidad a los abuelos que siempre están destacando las ventajas de un pasado mejor, es algo también muy propio de la mujer, del romanticismo y el suspiro por el amor que se rompió o evaporó de tanto vivirlo.
Mi mamá, por ejemplo, te hace sopa de nostalgia con cuatro imágenes de la semana pasada, no te digo ya el guiso que puede liar si la animas a  remontarse a la tarde de aquel verano cuando todos éramos chicos y jugábamos (según ella) felices a la sombra de un limonero…
Me he visto estos días tan de hormonas caprichosas sucumbir al embrujo de la nostalgia sin oponer demasiada resistencia, a pesar de que ha sido un propósito vital nunca añorar lo anterior.